viernes, 9 de enero de 2009

Nieve

Nieve blanca nieve, hoy esta nevando, ya están todos los tejados blancos y los coches envueltos en una gruesa capa de hielo, esperando a ser rescatados por sus dueños para ser puestos en marcha y entrar en calor.

Los copos, con sus delicados cuerpos caen despacio amontonándose en todas las superficies donde chocan. Danzan alegremente, chocándose unos contra otros, haciendo figuras extrañas. Esta tarde es una de esas perfectas tardes para hacer guerras de bolas de nieve, unos contra otros, dejando atrás la madurez, para convertirnos en niños inquietos y felices. Y ¿por que no? Hacer algún muñeco de nueve que otro. Creo que algunas veces los adultos somos mas crios que los propios niños. Pero a mi particularmente no me importa nada.

Creo que hoy es una buena opción para recoger un cuenco de nieve, y dejarla dentro del hogar, en mi pequeño espacio. Y después de la guerra de bolas de nieve, y un buen chocolate espesito y calentito. Una mantita y un buen libro, para continuar con un bol enorme de palomitas para ver una de esas películas romanticonas que tanto me gustan, al calorcito de mi familia que ya se abra acurrucado a mi vera, sin olvidarme de nuestro fiel amigo perruno, que no abra perdido el tiempo en buscar su lugar favorito para estar junto a nosotros…

Se me hace la boca agua solo de pensar en la tarde que me espera, algo que a lo mejor a una mayoría le parecería de abuelas y aburrido. Pero yo soy feliz así, seré mas sencilla que el mecanismo de un chupete.

No hay comentarios:

Publicar un comentario